El espacio cripto de los creadores tiene un problema serio del que nadie quiere hablar abiertamente. Demasiados productos en este sector están plagados de tácticas de manipulación y mecánicas de tokens explotadoras. Hemos visto proyectos donde los tokens se utilizan exclusivamente con fines extractivos—inflando valoraciones sin ofrecer un valor real a los creadores o sus comunidades. El patrón sigue repitiéndose: lanzarse con grandes promesas, usar incentivos de tokens para impulsar un compromiso artificial, y luego observar cómo los primeros insiders se retiran mientras los creadores reales se quedan aguantando. Esto no es sostenible, y está dañando la credibilidad de proyectos legítimos que intentan construir algo significativo en el espacio de la economía de creadores.