Los verdaderos nunca se detienen. Cada minuto, estamos demostrando de qué estamos hechos—cabezas bajas, manos sucias, simplemente construyendo.
¿Creyentes? Verán cómo se desarrolla. El resto puede mirar desde la línea de banda.
Ver originales
Esta página puede contener contenido de terceros, que se proporciona únicamente con fines informativos (sin garantías ni declaraciones) y no debe considerarse como un respaldo por parte de Gate a las opiniones expresadas ni como asesoramiento financiero o profesional. Consulte el Descargo de responsabilidad para obtener más detalles.
Los verdaderos nunca se detienen. Cada minuto, estamos demostrando de qué estamos hechos—cabezas bajas, manos sucias, simplemente construyendo.
¿Creyentes? Verán cómo se desarrolla. El resto puede mirar desde la línea de banda.