Aquí viene la parte extraña: la Fed acaba de recortar los tipos en 25 puntos básicos, terminó con el endurecimiento cuantitativo, las tensiones comerciales entre EE. UU. y China se enfriaron e incluso se aprobó un ETF de staking de altcoins. Suena como el inicio de una fiesta cripto, ¿verdad? Pero octubre de 2024 acaba de cerrar en rojo por primera vez en 7 años. ¿Qué está pasando?
El analista cripto Ted Pillows explicó por qué esta vez es diferente.
La trampa de liquidez de la que nadie habla
Aquí está el asunto: poner fin al QT no significa que el dinero nuevo fluya mágicamente a los mercados. Solo significa que la Fed deja de drenar el sistema. Pero ¿cripto? Está sedienta. Necesita liquidez fresca real, ya sea de un nuevo QE (que no va a ocurrir pronto) o del Tesoro liberando fondos del TGA. Ahora mismo, ninguna de las dos opciones está sobre la mesa.
El problema de sentimiento es real
Mira la dominancia de las stablecoins: los minoristas y las instituciones están al margen como si fuera el descanso del partido. No tienen suficiente confianza para volver a entrar; solo esperan a que se despeje el panorama. Mientras tanto, acaban de producirse liquidaciones por valor de 1.330 millones de dólares (BTC, ETH, DOGE, XRP sufriendo las pérdidas) y las salidas de los ETF siguen acumulándose. Eso reduce el apalancamiento en todas partes.
Los vientos macroeconómicos son brutales
Entre la incertidumbre geopolítica y las inconsistencias económicas, el sentimiento positivo en cripto no es suficiente para avanzar. Es como intentar llevar una moneda a la luna con un espagueti mojado: los vientos de cola se convierten constantemente en vientos en contra.
En resumen: No es un problema exclusivo de las criptomonedas. Es una combinación de liquidez, confianza y factores macroeconómicos que apuntan a la baja al mismo tiempo.
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Por qué el repunte de Bitcoin sigue perdiendo fuerza: Las 4 cosas de las que nadie habla
Aquí viene la parte extraña: la Fed acaba de recortar los tipos en 25 puntos básicos, terminó con el endurecimiento cuantitativo, las tensiones comerciales entre EE. UU. y China se enfriaron e incluso se aprobó un ETF de staking de altcoins. Suena como el inicio de una fiesta cripto, ¿verdad? Pero octubre de 2024 acaba de cerrar en rojo por primera vez en 7 años. ¿Qué está pasando?
El analista cripto Ted Pillows explicó por qué esta vez es diferente.
La trampa de liquidez de la que nadie habla
Aquí está el asunto: poner fin al QT no significa que el dinero nuevo fluya mágicamente a los mercados. Solo significa que la Fed deja de drenar el sistema. Pero ¿cripto? Está sedienta. Necesita liquidez fresca real, ya sea de un nuevo QE (que no va a ocurrir pronto) o del Tesoro liberando fondos del TGA. Ahora mismo, ninguna de las dos opciones está sobre la mesa.
El problema de sentimiento es real
Mira la dominancia de las stablecoins: los minoristas y las instituciones están al margen como si fuera el descanso del partido. No tienen suficiente confianza para volver a entrar; solo esperan a que se despeje el panorama. Mientras tanto, acaban de producirse liquidaciones por valor de 1.330 millones de dólares (BTC, ETH, DOGE, XRP sufriendo las pérdidas) y las salidas de los ETF siguen acumulándose. Eso reduce el apalancamiento en todas partes.
Los vientos macroeconómicos son brutales
Entre la incertidumbre geopolítica y las inconsistencias económicas, el sentimiento positivo en cripto no es suficiente para avanzar. Es como intentar llevar una moneda a la luna con un espagueti mojado: los vientos de cola se convierten constantemente en vientos en contra.
En resumen: No es un problema exclusivo de las criptomonedas. Es una combinación de liquidez, confianza y factores macroeconómicos que apuntan a la baja al mismo tiempo.