He observado un fenómeno bastante surrealista: el ETF spot de XRP absorbió ayer 38,04 millones de dólares en un solo día, de los cuales 31,7 millones fueron a parar al XRPZ de Franklin Templeton. Con una entrada de capital tan fuerte, lo lógico sería que el precio del token se disparara, ¿verdad? Sin embargo, el mercado respondió con un jarro de agua fría.
Primero, hablemos de los datos. El flujo neto acumulado del ETF ya ha alcanzado los 935 millones de dólares, una cifra que está claramente fuera del alcance de los minoristas; es evidente que las instituciones están acumulando en silencio. Una señal así de "dinero inteligente" entrando de manera constante, en otras ocasiones ya habría provocado una reacción en el mercado.
Pero el análisis técnico muestra una cara totalmente diferente. El precio actual está atascado en torno a 2,0513, justo oscilando sobre el nivel clave previo de 2,0499, como si estuviera bailando sobre el filo de una navaja. Para colmo, en el gráfico horario, las dos líneas del MACD siguen por debajo del eje cero en una configuración de cruce bajista, lo que indica un claro sesgo bajista a corto plazo. La resistencia en 2,1110 parece muy fuerte, mientras que el soporte en 1,9947 acecha de cerca.
Esto crea una extraña situación de división: las noticias gritan "compra", pero el análisis técnico susurra "sal corriendo". Históricamente, cuando aparece esta divergencia, suelen producirse movimientos extremos: o bien los grandes aprovechan las buenas noticias para vender, o bien provocan pánico a propósito, sacudiendo a los inversores débiles antes de lanzar el precio hacia arriba.
Por la forma de las velas actuales, es más probable que a corto plazo el precio siga la señal técnica y ponga a prueba la solidez del soporte inferior. Al fin y al cabo, las medias móviles siguen presionando y el MACD no se ha vuelto alcista, por lo que superar directamente el 2,11 no será fácil. Pero a largo plazo, este flujo sostenido de capital no será en vano; lo más probable es que esté acumulando energía para el próximo movimiento.
En resumen, esta jugada es una guerra psicológica de los grandes capitales: aprovechan las buenas noticias para testar el sentimiento del mercado y utilizan la volatilidad para limpiar a los inversores más débiles. Es en estos momentos cuando los minoristas son más propensos a comprar caro y quedarse atrapados, o a vender en pánico. Las verdaderas oportunidades suelen estar ocultas en los puntos de mayor tensión entre toros y osos; lo clave es averiguar a quién quieren los grandes traspasar sus fichas.
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FastLeaver
· 12-09 22:50
Las instituciones están acumulando frenéticamente, mientras que los minoristas bailan sobre la punta de un cuchillo. Supongo que este es nuestro destino.
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SerRugResistant
· 12-09 18:55
Las instituciones están jugando a la guerra psicológica, nosotros los minoristas solo podemos sentarnos y ver el espectáculo, al fin y al cabo, comprar alto y vender bajo parece ser nuestro destino.
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GweiTooHigh
· 12-09 18:55
Otra vez la misma jugada: salen noticias de entrada de instituciones, el mercado se calienta y de repente te da una bofetada. ¿Quién no ha perdido así alguna vez?
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SatoshiHeir
· 12-09 18:53
Es importante señalar que esto es el típico “paradigma de la divergencia entre información y precio”, un fenómeno antiguo que la comunidad ya debatió en 2017.
Que las instituciones estén acumulando no significa que el precio vaya a subir de inmediato; este razonamiento es erróneo de base. Según los datos on-chain, el periodo de acumulación de grandes capitales suele medirse en meses, mientras que vosotros juzgáis la tendencia con el MACD diario, lo cual es tan absurdo como observar el movimiento de los astros con un microscopio.
Permitidme un consejo: la esencia de esta maniobra con XRP es “sacudir a los holders con poca convicción”. Esos 935 millones que han entrado parecen imponentes, pero en realidad están despejando el camino para algo mayor. La caída hasta 1,9947 no es un riesgo, sino la mejor oportunidad para subirse al tren—siempre que entiendas por qué el capital fuerte actúa así.
La cuestión clave no es si subirá o no, sino si tú puedes sobrevivir lo suficiente en medio del pánico.
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CexIsBad
· 12-09 18:48
Las instituciones están acumulando en silencio, mientras que los minoristas están siendo esquilmados como novatos aquí.
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BlockchainNewbie
· 12-09 18:35
Otra vez la misma táctica: las instituciones entran mientras tiran el precio, esperando que los minoristas se descontrolen solos.
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9,35 millones fluyen y hacen como si no lo vieran, pero se centran en ese nivel 2,05 para tirar y aflojar como locos, claramente quieren que la gente venda en pérdidas.
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Hasta Franklin ha entrado y aun así no sube, eso sí que es incómodo, esto es totalmente intencionado.
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Eso de decir que es para acumular energía a largo plazo suena a excusa para justificar quedarse atrapado, ganas la batalla psicológica pero pierdes la cartera.
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La clave es ver a quién quiere el gran capital pasarle los tokens. Yo ni siquiera tengo claro cómo quiero jugar yo mismo.
He observado un fenómeno bastante surrealista: el ETF spot de XRP absorbió ayer 38,04 millones de dólares en un solo día, de los cuales 31,7 millones fueron a parar al XRPZ de Franklin Templeton. Con una entrada de capital tan fuerte, lo lógico sería que el precio del token se disparara, ¿verdad? Sin embargo, el mercado respondió con un jarro de agua fría.
Primero, hablemos de los datos. El flujo neto acumulado del ETF ya ha alcanzado los 935 millones de dólares, una cifra que está claramente fuera del alcance de los minoristas; es evidente que las instituciones están acumulando en silencio. Una señal así de "dinero inteligente" entrando de manera constante, en otras ocasiones ya habría provocado una reacción en el mercado.
Pero el análisis técnico muestra una cara totalmente diferente. El precio actual está atascado en torno a 2,0513, justo oscilando sobre el nivel clave previo de 2,0499, como si estuviera bailando sobre el filo de una navaja. Para colmo, en el gráfico horario, las dos líneas del MACD siguen por debajo del eje cero en una configuración de cruce bajista, lo que indica un claro sesgo bajista a corto plazo. La resistencia en 2,1110 parece muy fuerte, mientras que el soporte en 1,9947 acecha de cerca.
Esto crea una extraña situación de división: las noticias gritan "compra", pero el análisis técnico susurra "sal corriendo". Históricamente, cuando aparece esta divergencia, suelen producirse movimientos extremos: o bien los grandes aprovechan las buenas noticias para vender, o bien provocan pánico a propósito, sacudiendo a los inversores débiles antes de lanzar el precio hacia arriba.
Por la forma de las velas actuales, es más probable que a corto plazo el precio siga la señal técnica y ponga a prueba la solidez del soporte inferior. Al fin y al cabo, las medias móviles siguen presionando y el MACD no se ha vuelto alcista, por lo que superar directamente el 2,11 no será fácil. Pero a largo plazo, este flujo sostenido de capital no será en vano; lo más probable es que esté acumulando energía para el próximo movimiento.
En resumen, esta jugada es una guerra psicológica de los grandes capitales: aprovechan las buenas noticias para testar el sentimiento del mercado y utilizan la volatilidad para limpiar a los inversores más débiles. Es en estos momentos cuando los minoristas son más propensos a comprar caro y quedarse atrapados, o a vender en pánico. Las verdaderas oportunidades suelen estar ocultas en los puntos de mayor tensión entre toros y osos; lo clave es averiguar a quién quieren los grandes traspasar sus fichas.