Dos niños estuvieron enfermos durante tres días, y yo también los cuidé durante tres días. Ahora, por fin tengo un poco de tiempo para disfrutar de esta tranquilidad y soledad.
Una copa de vino, un cigarro, un poco de música,
¡La felicidad de un hombre de mediana edad es así de simple!
El mayor desafío que enfrentamos: ¡mil personas con el mismo camino, pero diferentes corazones!
Pero al mismo tiempo, las personas que pueden vivir con claridad en un mundo así, son en realidad muy pocas.
Ver originales
Esta página puede contener contenido de terceros, que se proporciona únicamente con fines informativos (sin garantías ni declaraciones) y no debe considerarse como un respaldo por parte de Gate a las opiniones expresadas ni como asesoramiento financiero o profesional. Consulte el Descargo de responsabilidad para obtener más detalles.
Dos niños estuvieron enfermos durante tres días, y yo también los cuidé durante tres días. Ahora, por fin tengo un poco de tiempo para disfrutar de esta tranquilidad y soledad.
Una copa de vino, un cigarro, un poco de música,
¡La felicidad de un hombre de mediana edad es así de simple!
El mayor desafío que enfrentamos: ¡mil personas con el mismo camino, pero diferentes corazones!
Pero al mismo tiempo, las personas que pueden vivir con claridad en un mundo así, son en realidad muy pocas.