Los contratos inteligentes no son un problema de capacidad de ejecución, el problema es que se ejecutan de manera demasiado perfecta — incluso los datos corruptos se ejecutan perfectamente.
Web3 ha evolucionado desde los datos de precios iniciales hasta activos tokenizados, mercados predictivos, agentes autónomos e incluso lógica legal en la cadena. Los viejos métodos de los oráculos tradicionales (obtener datos digitales rápidamente y garantizar la actualidad) ya no son suficientes.
La idea de APRO es interesante, no se trata de crear otro oráculo, sino de construir una capa de fiabilidad entre los datos y la ejecución. Específicamente: hacer transparentes las fuentes de datos, rastreable el proceso de interpretación y claro el mecanismo de responsabilidad. Solo así se pueden manejar las informaciones complejas, caóticas y difíciles de predecir del mundo real.
Las rutas tecnológicas son diferentes, pero la lógica central es la misma: cuanto más complejas sean las aplicaciones Web3, más larga será la cadena de confianza, y más estrictos serán los requisitos de calidad de datos y transparencia en los procesos.
Ver originales
Esta página puede contener contenido de terceros, que se proporciona únicamente con fines informativos (sin garantías ni declaraciones) y no debe considerarse como un respaldo por parte de Gate a las opiniones expresadas ni como asesoramiento financiero o profesional. Consulte el Descargo de responsabilidad para obtener más detalles.
8 me gusta
Recompensa
8
5
Republicar
Compartir
Comentar
0/400
FantasyGuardian
· 12-25 12:44
Ja, por eso antes muchos proyectos fracasaban, entraban datos basura y salía un bug perfecto
Ver originalesResponder0
DegenMcsleepless
· 12-24 12:54
Esta es la raíz del problema, basura con basura sale, incluso el motor de ejecución más potente no puede salvar la mala fuente.
La calidad de los datos es la verdadera limitación, más importante que cualquier otra cosa.
Ver originalesResponder0
GmGmNoGn
· 12-24 12:47
Esta es la trampa mortal de Web3, por muy potente que sea el motor, no puede salvar el aceite basura.
Un montón de datos, por muy perfecta que sea la ejecución, no sirve de nada.
La idea de APRO en esta ola ciertamente es diferente, pero en realidad es solo una forma de cubrir las lagunas de los oráculos tradicionales.
Se dice que es transparente y rastreable, pero en realidad no...
Cuanto más avanzamos, más se puede ver que no es un problema técnico, sino un problema de confianza.
Ver originalesResponder0
FlashLoanLord
· 12-24 12:35
Jaja, la expresión "ejecución perfecta de datos basura" es genial, es el destino de los contratos inteligentes.
La fuente de los datos es mala, por más que la ejecución sea excelente, no se puede salvar, la idea de APRO realmente tocó el punto clave.
Pero, para ser honestos, que sea transparente + rastreable + responsable suena fácil, pero en la práctica es otra historia...
Es un problema viejo, todavía depende de quién defina lo que es "confiable".
¿Después de tantos años jugando con oráculos, ahora piensan en hacer una "capa intermedia"? Un poco tarde, ¿no?
Lo que temo es que al final vuelva a convertirse en otro sistema de caja negra, creyendo en él de forma ciega y repetitiva.
Web3 se vuelve cada vez más complejo, y el costo de confianza en realidad está en auge, pensar en ello con detalle es aterrador.
Ver originalesResponder0
OnChainArchaeologist
· 12-24 12:28
Al final, sigue siendo datos basura entrando en contratos basura, por muy perfecto que sea la ejecución del contrato inteligente, no se puede salvar.
Creo que la idea de APRO funciona, transparencia + trazabilidad + responsabilidad, realmente apunta a los puntos clave.
Los contratos inteligentes no son un problema de capacidad de ejecución, el problema es que se ejecutan de manera demasiado perfecta — incluso los datos corruptos se ejecutan perfectamente.
Web3 ha evolucionado desde los datos de precios iniciales hasta activos tokenizados, mercados predictivos, agentes autónomos e incluso lógica legal en la cadena. Los viejos métodos de los oráculos tradicionales (obtener datos digitales rápidamente y garantizar la actualidad) ya no son suficientes.
La idea de APRO es interesante, no se trata de crear otro oráculo, sino de construir una capa de fiabilidad entre los datos y la ejecución. Específicamente: hacer transparentes las fuentes de datos, rastreable el proceso de interpretación y claro el mecanismo de responsabilidad. Solo así se pueden manejar las informaciones complejas, caóticas y difíciles de predecir del mundo real.
Las rutas tecnológicas son diferentes, pero la lógica central es la misma: cuanto más complejas sean las aplicaciones Web3, más larga será la cadena de confianza, y más estrictos serán los requisitos de calidad de datos y transparencia en los procesos.