En los proyectos de Web3, ¿se necesitan más empleados creativos y proactivos o "tornillos" obedientes?
En cualquier organización, parece existir una paradoja:
Los empleados más creativos suelen ser también los más difíciles de "gestionar". Su pensamiento independiente genera incertidumbre y su pasión rompe el orden establecido.
Así, muchos gerentes elegirán instintivamente la "ruta segura": cultivar ejecutores obedientes, eliminar a aquellos "problemáticos" y hacer que todo sea predecible y controlable.
A corto plazo, se ha reducido el riesgo, pero a largo plazo, la organización pierde su vitalidad.
Porque la vitalidad de la organización proviene precisamente de aquellas personas que "no son muy obedientes".
Cuando elegimos la mediocridad para reducir costos de gestión, y rechazamos las disidencias para disminuir la fricción, también estamos apagando con nuestras propias manos la chispa de la innovación.
Al final, toda la organización caerá en un estado que parece estable, pero que en realidad está muerto: sin oleadas, y sin futuro.
Esto es común en las industrias tradicionales, pero en Web3, ¿qué tipo de personas son las más escasas?
Ver originales
Esta página puede contener contenido de terceros, que se proporciona únicamente con fines informativos (sin garantías ni declaraciones) y no debe considerarse como un respaldo por parte de Gate a las opiniones expresadas ni como asesoramiento financiero o profesional. Consulte el Descargo de responsabilidad para obtener más detalles.
En los proyectos de Web3, ¿se necesitan más empleados creativos y proactivos o "tornillos" obedientes?
En cualquier organización, parece existir una paradoja:
Los empleados más creativos suelen ser también los más difíciles de "gestionar". Su pensamiento independiente genera incertidumbre y su pasión rompe el orden establecido.
Así, muchos gerentes elegirán instintivamente la "ruta segura": cultivar ejecutores obedientes, eliminar a aquellos "problemáticos" y hacer que todo sea predecible y controlable.
A corto plazo, se ha reducido el riesgo, pero a largo plazo, la organización pierde su vitalidad.
Porque la vitalidad de la organización proviene precisamente de aquellas personas que "no son muy obedientes".
Cuando elegimos la mediocridad para reducir costos de gestión, y rechazamos las disidencias para disminuir la fricción, también estamos apagando con nuestras propias manos la chispa de la innovación.
Al final, toda la organización caerá en un estado que parece estable, pero que en realidad está muerto: sin oleadas, y sin futuro.
Esto es común en las industrias tradicionales, pero en Web3, ¿qué tipo de personas son las más escasas?