
Bitcoin dominance es el porcentaje que representa la capitalización de mercado de Bitcoin respecto a la capitalización total del mercado de criptomonedas.
Este indicador muestra la “porción” de Bitcoin dentro del conjunto del mercado cripto. La capitalización de mercado se calcula multiplicando el precio por el suministro circulante, mientras que la capitalización total suma todos los activos cripto. Dominance = capitalización de mercado de Bitcoin ÷ capitalización total cripto. Los gráficos habituales son BTC.D de TradingView y “Bitcoin Dominance” de CoinMarketCap.
Algunas versiones excluyen las stablecoins para comparar con mayor claridad Bitcoin frente a otros activos de riesgo. Este enfoque se utiliza más en análisis de trading, aunque cada plataforma puede aplicar metodologías distintas.
Bitcoin dominance permite evaluar las preferencias de flujo de capital entre Bitcoin y el resto de criptomonedas.
Cuando aumenta la dominancia, los fondos suelen dirigirse a Bitcoin, quedando otros sectores rezagados o con correcciones más profundas. Si la dominancia cae, suele ser “alt season”, con activos no-Bitcoin superando en rendimiento. Para quienes se inician, esta métrica ayuda a asignar cartera, fijar límites de riesgo y seleccionar sectores a vigilar.
Desde la óptica de asignación, si la dominancia sube de forma sostenida, aumentar el peso de Bitcoin en la cartera suele ser más seguro. Si la dominancia baja, se puede añadir de forma moderada activos no-Bitcoin de alta calidad, pero siempre con stop-loss definidos para evitar decisiones impulsivas.
La dominancia varía según el precio de Bitcoin, el precio de otras monedas y el suministro de stablecoins.
El numerador es la capitalización de mercado de Bitcoin y el denominador la capitalización total cripto. Si el numerador crece más rápido, la dominancia sube; si el denominador lo hace (por ejemplo, por subidas en Ethereum, blockchains principales, tokens de IA o expansión de stablecoins), la dominancia baja.
Dos factores adicionales influyen en la dominancia. Primero, el suministro de stablecoins: cuando hay mucho capital en stablecoins, la capitalización total aumenta, pero los activos de riesgo no necesariamente ganan fuerza, lo que diluye la dominancia. Segundo, la emisión de nuevas monedas y la rotación sectorial: los lanzamientos pueden aumentar temporalmente el denominador y reducir la dominancia, aunque Bitcoin se mantenga fuerte.
Las variaciones en la dominancia se observan en el liderazgo de precios, la distribución del volumen y la dinámica de la tasa de financiación.
En la página de mercados de Gate, si suben la dominancia de Bitcoin y el precio de BTC, suele aumentar la cuota de volumen de trading en Bitcoin, las principales altcoins rinden menos y las tasas de financiación long en derivados se estabilizan, señalando preferencia por el “líder del mercado”.
Si la dominancia baja, la lista de ganadores spot de Gate muestra subidas sectoriales: temáticas como Layer2, IA y GameFi rotan con rapidez, las monedas de pequeña capitalización presentan mayor volatilidad intradía y las tasas de financiación cambian más a menudo de positivo a negativo, lo que indica búsqueda de oportunidades de “mayor beta”.
En DeFi, el aumento de la dominancia implica que los tipos de préstamo y colaterales se inclinan hacia activos de Bitcoin; si la dominancia cae, más usuarios piden stablecoins prestadas contra Bitcoin para buscar retornos en sectores no-Bitcoin, generando oportunidades cruzadas.
Debes analizar la dominancia junto con el precio, la capitalización total, el suministro de stablecoins y el volumen de trading.
Paso 1: Consulta el gráfico BTC.D o el de Bitcoin dominance en CoinMarketCap para identificar si la tendencia es alcista, bajista o lateral.
Paso 2: Visualiza a la vez la capitalización total (por ejemplo, TOTAL en TradingView o el panel de la plataforma) y el precio de Bitcoin para ver si el movimiento lo impulsa la “fuerza del numerador” o la “fuerza del denominador”. Si predomina el numerador, conviene ser defensivo; si lo hace el denominador, ofensivo.
Paso 3: En Gate, combina volumen de trading y rendimiento sectorial. Si la dominancia sube y el volumen se concentra en pares BTC y stablecoins, prioriza mayor peso en Bitcoin y stablecoins; si la dominancia baja y los sectores suben en bloque, aumenta progresivamente la asignación a principales activos no-Bitcoin.
Paso 4: Añade filtros de suministro de stablecoins y tasa de financiación. Si el suministro de stablecoins crece rápido pero los precios no acompañan, hay capital cauteloso: no confundas una caída de la dominancia con una alt season fuerte.
Paso 5: Define parámetros de riesgo. Si la tendencia de la dominancia se revierte, toma beneficios o reduce exposición por tramos para evitar errores por depender de un solo indicador.
En lo que va de año, la dominancia se ha mantenido en un rango alto, aunque con varias rotaciones sectoriales en seis meses.
En el primer y segundo trimestre de 2025, impulsada por expectativas macroeconómicas sobre tipos de interés y narrativas en torno a Bitcoin, la dominancia alcanzó el 55 % en varias ocasiones; datos de CoinMarketCap y TradingView muestran oscilaciones entre el 50 % y el 56 % el último año. Tras varios rallies liderados por Bitcoin, el liderazgo pasó a las principales altcoins.
Los datos del tercer trimestre de 2025 muestran medias mensuales del 52 %-54 %, con BTC.D bajando a mínimos (51 %-52 %) cuando Ethereum y los sectores de IA ganaron fuerza. En el cuarto trimestre, en noviembre la dominancia cayó cerca del 50 %, para repuntar al 53 % en diciembre, reflejando el regreso cíclico del capital a Bitcoin.
Como referencia, la media de 2024 estuvo entre el 48 % y el 50 %. El repunte de este año se asocia a la madurez de productos spot, mayor entrada institucional y mejor estratificación del riesgo. Consulta siempre fuentes en tiempo real y especifica plataforma y metodología (por ejemplo, si se excluyen stablecoins).
La dominancia es un “porcentaje”; la capitalización total, el “tamaño”.
La capitalización total muestra si el “pastel” cripto crece o se reduce; la dominancia indica si la porción de Bitcoin aumenta o disminuye. Si la capitalización total sube pero la dominancia baja, otros activos superan a Bitcoin; si la capitalización total baja pero la dominancia sube, Bitcoin resiste mejor o cae menos.
En la práctica, usa ambos: si la capitalización total sube y la dominancia baja, hay expansión sectorial; si la capitalización total cae y la dominancia sube, hay rotación defensiva y cobertura.
El error más frecuente es usar la dominancia como señal única de compra o venta.
La dominancia solo indica “fuerza relativa”, no si todo sube. Si la dominancia sube, puede deberse a que Bitcoin sube poco y el resto cae mucho; si baja, quizá Bitcoin está plano y las altcoins suben algo. Estas situaciones requieren confirmación por análisis de precio y volumen.
Otro error es ignorar la metodología. Incluir stablecoins o tokens ilíquidos puede alterar las cifras. Cada plataforma calcula BTC.D o Dominance de forma diferente.
También es un error ignorar los plazos. Usar indicadores diarios para decisiones semanales puede llevar a errores por ruido a corto plazo; para detectar tendencias, usa gráficos semanales o mensuales y diarios para la ejecución.
Por último, pasar por alto la liquidez o nuevas emisiones puede distorsionar las cifras: listados de nuevas monedas o cambios de liquidez alteran temporalmente numerador y denominador. Si los datos parecen anómalos, revisa volumen de trading, suministro de stablecoins y noticias sectoriales.
Que la dominancia de Bitcoin esté por debajo del 50 % suele señalar un fuerte desempeño de las altcoins y mayor apetito de riesgo. Los inversores buscan mayores retornos, pero asumen más volatilidad: las monedas de pequeña capitalización fluctúan más. Históricamente, cuando la dominancia cae por debajo del 40 %, suele indicar un mercado sobrecalentado que requiere cautela.
Utilízalo como referencia de riesgo, no como señal directa de trading. Una dominancia superior al 65 % indica un mercado conservador, apto para inversores prudentes; por debajo del 50 % el riesgo es mayor y la gestión de cartera debe ser estricta. Observa la tendencia de la dominancia en Gate y adapta tu estrategia a tu tolerancia al riesgo: no sigas el hype sin análisis.
Significa que las altcoins superan el rendimiento de Bitcoin. Bitcoin dominance mide la posición relativa, no el movimiento absoluto: todo el mercado puede subir, pero si las altcoins suben más rápido, la cuota de Bitcoin se diluye. Esto ocurre a menudo en mercados alcistas, cuando los inversores buscan más rentabilidad en monedas menores.
No hay una relación causal directa. Bitcoin puede marcar máximos de precio y ver caer su dominancia si el mercado cripto sube más rápido, o al revés. La dominancia refleja la importancia relativa de Bitcoin en el ecosistema, no solo su precio. Consulta ambos indicadores en plataformas como Gate para comprender la dinámica del mercado.
Las instituciones lo emplean para evaluar el riesgo global del mercado y orientar la asignación de activos. Una dominancia alta indica concentración y riesgo controlado; una baja, mayor dispersión y volatilidad. Es un referente clave para trading cuantitativo y gestión de carteras: las tendencias de dominancia suelen anticipar cambios de sentimiento y ayudan a ajustar posiciones con antelación.


