¡Lombard hace que el final de BTC.b sea diferente!
Avalanche ha entregado BTC.b a Lombard, lo que no solo es una migración técnica, sino más bien una transferencia de poder.
El problema de Bitcoin en la cadena nunca ha sido la falta de liquidez, sino la falta de infraestructura a nivel de confianza. En el pasado, BTC.b era parte de Avalanche, con un volumen circulante de más de 500 millones de dólares, integrado en protocolos principales como Aave y GMX, pero su mecanismo de interoperabilidad y custodia todavía es un modelo semi-cerrado y centralizado.
Después de que Lombard asumió el control, esta estructura fue completamente reescrita. Una alianza de seguridad compuesta por 15 instituciones reemplazó a los nodos Warden originales, Cubist se encarga de la capa de firma de claves y Chainlink CCIP realiza la verificación de reservas en tiempo real.
Lo más importante es que BTC.b ya no es un activo de cadena única, sino que se ha convertido en un estándar de múltiples cadenas. Se sincronizará con ecosistemas como Ethereum, Solana, MegaETH, etc. Para los desarrolladores, esta es la primera vez que pueden acceder a la liquidez real de Bitcoin sin darse cuenta; para las instituciones, es una estructura que puede ser auditada y reconocida por sistemas de cumplimiento.
En el largo ciclo de financiamiento de Bitcoin, esta adquisición es una señal:
La lógica de la infraestructura está en reversa. En el pasado, los activos en cadena debían integrarse con BTC; Ahora es el momento de que el BTC se integre en la cadena.
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¡Lombard hace que el final de BTC.b sea diferente!
Avalanche ha entregado BTC.b a Lombard, lo que no solo es una migración técnica, sino más bien una transferencia de poder.
El problema de Bitcoin en la cadena nunca ha sido la falta de liquidez, sino la falta de infraestructura a nivel de confianza. En el pasado, BTC.b era parte de Avalanche, con un volumen circulante de más de 500 millones de dólares, integrado en protocolos principales como Aave y GMX, pero su mecanismo de interoperabilidad y custodia todavía es un modelo semi-cerrado y centralizado.
Después de que Lombard asumió el control, esta estructura fue completamente reescrita. Una alianza de seguridad compuesta por 15 instituciones reemplazó a los nodos Warden originales, Cubist se encarga de la capa de firma de claves y Chainlink CCIP realiza la verificación de reservas en tiempo real.
Lo más importante es que BTC.b ya no es un activo de cadena única, sino que se ha convertido en un estándar de múltiples cadenas. Se sincronizará con ecosistemas como Ethereum, Solana, MegaETH, etc. Para los desarrolladores, esta es la primera vez que pueden acceder a la liquidez real de Bitcoin sin darse cuenta; para las instituciones, es una estructura que puede ser auditada y reconocida por sistemas de cumplimiento.
En el largo ciclo de financiamiento de Bitcoin, esta adquisición es una señal:
La lógica de la infraestructura está en reversa.
En el pasado, los activos en cadena debían integrarse con BTC;
Ahora es el momento de que el BTC se integre en la cadena.
La historia de BTC.b apenas comienza.
#KaitoYap @KaitoAI #Yap $BARD @Lombard_Finance